La tafona de la Finca Pública Galatzó fue restaurada por gracias a un convenio entre el Consell de Mallorca y el Ayuntamiento de Calvià, durante los años 2010 y 2011. Tradicionalmente presente en este tipo de explotaciones, la primera referencia histórica aparece en el inventario de Antonio Vivot en 1589, siendo el propietario de Galatzó. La Tafona de Galatzó se describe como una tafona tradicional de dos bigas. Según el nuevo inventario de 1828 continuaba siendo de dos bigas.

A finales del siglo XIX comenzó, la sustitución generalizada de estas tafonas tradicionales por las hidráulicas, dado el incremento de rendimiento que de ellas se obtenian, alrededor de un 8%. Parece ser que esta sustitución se produjo en Galatzó alrededor del año 1924. La última referencia al funcionamiento de esta Tafona es de 1956 y según testimonios su funcionamiento ya era testimonial, tanto es así que a partir de 1957 se empezó a sustituir gran parte del olivar por el actual almendral, con lo que se dejó de cosechar la oliva y la tafona dejó definitivamente de funcionar